CUENTAS CLARAS (PALAU DE LES ARTS)...

En torno a los cuatro millones de euros anuales, 665 millones de las antiguas ya cada vez más añoradas pesetas, 11.000 euros diarios, son los necesarios para el simple mantenimiento ordinario del edifico diseñado por Calatrava.
O lo que es lo mismo, mantener el Palau de les Arts cuesta casi la mitad del presupuesto anual de que dispone el Instituto Valenciano de la Música. Y en ello no cuenta el personal-salvo el relativo a limpieza o seguridad, entre otro-ni los gastos artísticos o administrativos.
NO SE ENGAÑEN. Las cuentas del Palau de les Arts son una incógnita; oscuras y preservadas gracias a la fórmula jurídica elegida para su creación, una fundación manejada desde la esfera política.
A todo ello hay que sumar los 18 millones de euros estimados en la reparación de los desperfectos producidos durante su inundación. Algo que ya le venían avisando a un bisoño personaje denominado Calatrava que no atendió a razones cuando le recomendaban que aplicase cálculos arquitectónicos diferenciados a su nueva Falla con cabeza de enemigo de Mazinger Z, ya que la iba a colocar en zona fluvial y próxima al mar. De don Santiago nos ocuparemos con atención más adelante en otra de estas puntuales crónicas. "Agora" nos toca otro tema.
El Palau de les Arts, cuyo coste de construcción ha sobrepasado los... tchan tachan... 250 millones de euros (41.500 millones de pesetas), necesita de un presupuesto anual cercano a los 50 millones. Este año la Generalitat ha recortado su aportación anual en cinco millones de euros dejándola en torno a los 25. También el Ayuntamiento de Valencia, que aportaba 1,5 millones, ha dejado su ayuda en un tercio. Algunos patrocinadores han desaparecido del mapa.
La recaudación por taquilla de la temporada se aproxima a los seis millones de euros. NO DA MÁS DE SÍ. La Generalitat confía en que la participación del Ministerio de Cultura se multiplique, pero desde el Gobierno central siempre se ha tenido claro que un incremento de carácter económico tiene que pasar por su presencia en el patronato del Palau de les Arts, NORMAL, en el que únicamente están representados la Generalitat y el consistorio de Valencia. Pero como entrar en el consejo, AH AMIGOS, supone poner al alcance de todos los patronos las cuentas del auditorio y tener capacidad de decisión, los gobernantes azuletes valencianos dicen que nanai y luego demagógicamente lanzan soflamas del rollo: ZAPATERO NO NOS QUIERE A LOS VALENCIANOS.
Vamos a ver. Si alguien me pide millones de euros, y yo le digo que perfecto, pero que en tal caso también quiero saber dónde va a parar ese dinero. Y entonces me dicen que entonces no, y seguidamente se van a la prensa y a los micros y atriles a decir NOS NIEGAN LA AYUDA CENTRAL PARA EL PALAU... ¿De qué coño estamos hablando señores?... El que tenga ojos que vea... El que tenga oídos que escuche... El que quiera seguir ciego y sordo que no lea estas cosas, que no piense, que no averigüe, que no haga otra cosa que babear como autista feliz en la cueva platónica fallera y que se quede con la única frase en su discurso de : MA QUESTÁ BONICA VALENCIA, XE TÚ!... mientras realmente nos vamos todos a ese lugar que tan contundentemente denominaba mi querido Fernando Fernán Gómez...