sábado, 29 de diciembre de 2012

Un Regreso obligado al Desierto...


Hace diez años viví uno de los viajes emocionales más importantes de mi vida. Tuve la suerte de participar como actor en el rodaje de la película "SAHARA, Cuentos de la guerra Saharaui" de Pedro Pérez Rosado. El corte final de la película mermó mucho mi intervención como soldado legionario, al igual que el de otros tantos compañeros. El metraje de la película se había extendido muchísimo. Pero el metraje de humanidad en mi ser, se extendió hasta lugares que no conocía. Así que a Pedro he de agradecer el haber participado en esa aventura casi espiritual. Y es que, al pasar cerca de un mes en Tifariti, a pocos kilómetros del lamentable muro marroquí, al convivir con los saharauis, al pasar noches contemplando las infinitas estrellas por doquier, al entrar en esa comunión espiritual solo comprendida por quienes han vivido el desierto en muchas de sus formas, al escuchar a los niños, a los no tan niños, y sobretodo a los ancianos todo lo que sufrieron en carne y dignidad por el atropello del rey de Marruecos desde la manipulada Marcha Verde de 1975 hasta nuestros incomprensibles días, uno se hizo materia de indignación, y pronto acudió a mí un comprensible apetito de justicia que aun hoy perdura, aunque ya de nuevo habitando años en la civilización occidental se vayan durmiendo en ocasiones los ímpetus que se generan en ciertos lugares castigados, ante ciertos rostros vilipendiados hasta lo indecible, pero que aguantan con luz en sus miradas, con nobleza en sus actitudes, con honor, eso que ya no existe en España, paradójicamente el país responsable de la situación en la que dejamos a nuestros hermanos saharauis. Podría hablar mucho sobre el tema. Tal vez lo haga en alguna ocasión. Pero hoy sólo quería agradecer a Pedro Pérez Rosado la realización de película WILAYA, que me ha transportado una vez más a aquel lugar. Pero sobretodo a Javier Bardem y Alvaro Longoria por HIJOS DE LAS NUBES, un documento que debería ser de proyección obligada en todos los institutos y colegios de España. Sobretodo los católicos y privados...

viernes, 28 de diciembre de 2012

VALENCIA.ESPACIO VACIO, una reflexión

Os dejo un extracto de la entrevista que me hicieron hace unos días y que ha sido publicada hoy en EL MUNDO dentro del suplemento ARTS. Se trata de la última reflexión que dije para cerrar el reportaje:

"El Teatro, no importa quien gobierne en un momento determinado, es una herramienta precisa para generar una sociedad importante. Entendiendo esto desde el cuidado del espectador infantil hasta el adulto, desde las Escuelas Oficiales y no Oficiales, desde que cada Escuela, Instituto, Universidad, Barrio tenga su ámbito teatral contrastado. Participar como actores o directores o espectadores en el Teatro es una experiencia que nos va uniendo más y mejor en un común denominador: el conocimiento de nosotros mismos. El Teatro nos humaniza. Y eso es fundamental ahora que todo el planeta comienza a estar deshumanizado. El Teatro nos salvará de esta época si no desahuciamos al Teatro"
... pues eso... 

lunes, 24 de diciembre de 2012

Cuentos de Navidad en la CASA DE LA CARIDAD


Esta tarde en la CASA DE LA CARIDAD, justo antes de reunirme en familia para la cena de Noche Buena, leeré junto a mi querido y admirado Carlos Aimeur unos cuentos de Ignacio Aldecoa y de Paul Auster. Nos vemos allí si queréis a eso de las 6 de la tarde.
Un honor interpretar a Auggie Wren ante tan fantástico público.

La deformación voluntaria del lenguaje

En mi viaje de estudio y de documentación para prepararme como Director a cantar en unos meses calvamente, me encuentro con este momento de EL ASESINO SIN GAJES de Ionesco, por supuesto...

LA MADRE PIPE: No perseguiremos sino castigaremos y haremos justicia. No colonizaremos a los pueblos sino que los ocuparemos. No explotaremos a los hombres sino que los haremos producir. El trabajo obligatorio se llamará trabajo voluntario. La guerra se llamará paz y todo será cambiado gracias a mí y a mis ocas... La tiranía restaurada se llamará disciplina y libertad- ¡La desgracia de todos los hombres es la felicidad humana!
...

pues eso...

miércoles, 12 de diciembre de 2012

VALENCIA. ESPACIO VACÍO



Hace años que me dedico a contar historias con la ayuda del celuloide, con un papel primeramente en blanco, pero indudablemente con la necesidad más visceral que racional del Teatro. Hace años que he tenido que emigrar una y mil veces a un Madrid que me recogía como podía tras la constante expulsión de un territorio que pronto se llena de golpe de posibilidades de trabajo, para de repente convertirse en una árida estación teatral. Siempre en cada una de las ocasiones que me he encontrado con el rostro reflejado en el paisaje de la castellana meseta que pasaba fugaz y raudo en la ventanilla del tren, ya dejando atrás mi ciudad, mi familia, mi gente, mis raíces, me ha acompañado de un modo insistente la misma sencilla o complicada pregunta: ¿Cómo puede ser que una ciudad como Valencia, con tanta tradición teatral, con un siglo de oro en su historia, con un catálogo histórico envidiable de nombres de la escena, con tantas y tantas posibilidades siga siendo un ESPACIO VACÍO?... Cansado quizás de lanzarme a mí mismo de manera silente esa insistente pregunta, quise reunirme con tres de los más significativos nombres de la escena valenciana (podrían haber sido muchos más) para ver si encontraba algunas respuestas. Quise que fueran Carles Alfaro, Carles Alberola y Rafa Calatayud, tres directores que rozaran la multidisciplina. Así acontece en una tierra llena de talento para sorpresa de la profesión en Madrid, en un sólo nombre y apellido solemos reunir los valencianos y valencianas a un director, actor o actriz, gestor, administrador, autor, empresario, docente, técnico, y en ocasiones incluso también padre o madre de familia. Todo ese talento poliédrico es un infinito impagable que no deja de perder Valencia día a día, por no cuidarlo, por no potenciarlo, por no promoverlo como debería. Valencia permite no sé si con indiferencia la pérdida de talento, quedándose poco a poco huérfana de artistas, erigiéndose como un ESPACIO VACÍO de talentos.
Alguien dijo en cierta ocasión que el tamaño de las sociedades se mide por los sueños de sus artistas. Me pregunto qué tamaño debemos de tener hoy en una tierra que no para de expulsar a sus soñadores...

VALENCIA. ESPACIO VACÍO, mi segundo largometraje documental, 
se estrena en la SGAE, c/Blanquerías 6, Valencia el próximo miércoles 19 de diciembre a las 18 h
proyectaremos la versión íntegra de 110 minutos
Entrada libre hasta completar aforo.
Os esperamos!