martes, 27 de abril de 2010

Palabras de Trigorin en LA GAVIOTA de Chejov...

Pues sabe usted cuál es mi luna particular?... Escribir… La necesidad de escribir… Una obsesión que me persigue día y noche; tengo que escribir, tengo que escribir… Acabo una novela y empiezo otra, sin saber muy bien por qué… y después una tercera y luego una cuarta… Escribo sin descanso como si no pudiese hacer otra cosa… ¿Cree usted que en esa carrera hay algo de… sincero… y de maravilloso… y de claro?... ¡Por Dios! Es una vida insensata… Y la prueba es que ahora estoy aquí a su lado, pero estoy todo el tiempo acordándome de que me está esperando una novela por terminar… Yo, por ejemplo, veo pasar una nube con forma de piano de cola y lo único que pienso es que tendré que decir en alguna ocasión que había una nube que parecía un piano de cola… Y, si de pronto huele a heliotropo, yo archivo: olor dulzón y olor de viuda y… acordarse de decirlo al contar una tarde de verano…Cualquier cosa que usted diga… o que diga yo, ¿qué más da?... la capturo inmediatamente y la guardo para mejor ocasión en el fondo de mi despensa literaria… por si acaso la necesito alguna vez… Y cuando dejo de trabajar da igual que me vaya al teatro o me vaya a pescar… Y da igual porque no puedo descansar ni olvidarme de nada de lo que tengo entre manos… Al contrario… la cabeza me da vueltas y más vueltas como si tuviese dentro una bola de hierro… Y la tiene… es un argumento nuevo y entonces tengo que volverme otra vez a la mesa de despacho y seguir escribiendo y escribiendo y escribiendo… Y así siempre, por siempre y para siempre...

No hay comentarios:

Publicar un comentario